Un día como hoy, la Virgen de Fátima les mostró cómo es el infierno a los tres niños pastorcitos Lucía, Francisco y Jacinta, en la Cova da Iria, en Fátima (Portugal).
El 13 de julio de 1917, en la tercera de sus apariciones, la Virgen María permitió que los niños tuvieran una visión del infierno para que comunicaran lo que les espera en el mundo invisible a las personas que no se convierten ni arrepienten de sus pecados mortales antes de morir.
Según narra la historia, ese día la Madre de Dios les reveló un secreto en tres partes a los pastorcitos. En la primera parte, la Virgen les mostró el infierno y les explicó cómo ayudar a los demás para que no se condenen.