Escarabajos sustentables en Australia

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La importación de escarabajos peloteros de África y Europa, con el fin de solucionar los […]

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La importación de escarabajos peloteros de África y Europa, con el fin de solucionar los problemas derivados de la acumulación de los excrementos del ganado en Australia, es uno de los ejemplos más paradójicos del papel clave de los insectos. Y es que durante muchos años el país ha enfrentado problemas con el excremento del ganado. 

Los primeros colonos que llegaron a Australia introdujeron animales como vacas, ovejas y caballos. Al principio eran pocos, pero en 1960 ya había 30 millones de bovinos y 77 millones de ovinos, números que desde entonces han seguido en aumento. 

Lo anterior supone una cantidad enorme de excremento. Una vaca en promedio defeca 12 veces al día, lo que supone entre 350 y 400 millones de defecaciones diarias – o unos 33 millones de toneladas por año. El problema es que en Australia esta enorme cantidad de excrementos no se reciclaba, porque los escarabajos peloteros australianos que habían evolucionado con los marsupiales no se interesaban por el excremento del ganado.

En ese sentido, el entomólogo francés Jean-Pierre Lumaret, del Commonwealth Scientific and Industrial Research Organization de Montpellier, quien participa en las importaciones australianas de coleópteros, menciona que los escarabajos peloteros proporcionan a los humanos unos servicios esenciales de forma gratuita.

El papel de estos insectos es fundamental, pues ayudan a introducir los microorganismos del suelo en los excrementos del ganado para transformarlos y reciclarlos. Si los escarabajos no trabajan en los excrementos, van a quedar secos en el suelo semanas, meses o incluso años.

Los excrementos acumulados sin reciclarse ocupaban en Australia un millón de hectáreas, una superficie enorme, que a su vez implicaba una reducción de pastos y pérdidas para los ganaderos. Así mismo, al no haber competencia de escarabajos en las boñigas, se multiplicaron las moscas hematófagas, que pican al ganado para extraer su sangre,” agregó el investigador. 

La idea de importar este tipo de escarabajos la planteó George Bornemissza, un australiano de origen húngaro que vio que ya se habían introducido especies de origen africano en Hawái con buenos resultados. Como Australia es un país muy vasto con climas muy distintos, se introdujeron especies de continentes con climas comparables. El costo del programa lo pagaron esencialmente los ganaderos, que tuvieron que aportar varias decenas de millones de dólares.

Los antecedentes

El primer programa duró entre 1968 y 1982, y se enviaron 45 especies procedentes de África y Europa, 23 de las cuales se han establecido y multiplicado en Australia. En 2017 se puso en marcha un programa más amplio y ambicioso que terminará en junio de 2023, siendo principalmente los ganaderos quienes pagan. 

Cabe señalar que los escarabajos seleccionados para Australia, de países como Marruecos y España, son especies que no compiten con la fauna local por los excrementos del ganado. 

Jean-Pierre Lumaret asegura que los escarabajos peloteros son un componente clave de los pastizales y que, desafortunadamente, mucha gente ignora los beneficios de los insectos.