Las cucarachas son insectos de metamorfosis incompleta, es decir, en su ciclo de vida experimentan tres etapas de cambio: el huevo, la ninfa (inmadura) y el adulto. Sin embargo, entre las especies más relevantes como plaga urbana existen diferencias en los ciclos reproductivos, que es importante conocer para conseguir tratamientos más efectivos en el control de infestaciones.
Conocer la biología básica y comportamiento de las cucarachas es esencial un manejo profesional. Toda información sobre su ciclo de vida y comportamiento es fundamental para lograr tratamientos de control exitosos. Entender el ciclo vital de las cucarachas Blatella germanica, Blatta orientalis y Periplaneta americana, es clave para el profesional del control de plagas. A pesar de que las tres realizan una metamorfosis incompleta, sus hábitos de puesta y sus periodos de incubación tienen diferencias, que pueden afectar a la efectividad de los tratamientos para controlarlas.
Conocer los lugares donde pueden hallarse ootecas puestas y también los distintos periodos de tiempo que estas necesitan para eclosionar, según la especie, permite aumentar la eficiencia de las aplicaciones de control.
Ciclo biológico
Las cucarachas son insectos paurometábolos, por lo que las ninfas son similares en apariencia a los adultos excepto por la falta del desarrollo de los órganos sexuales y porque las alas no están desarrolladas. Usualmente tienen reproducción sexual, aunque se ha reportado partenogénesis en algunas de ellas; la embriogénesis y ovoposición puede ocurrir dentro de la ooteca que es impermeable; ésta es depositada en algún tipo de sustrato, aunque algunas especies se liberan después. El desarrollo embriológico ocurre externamente a la hembra.
La Blatella germanica es ovípara. La hembra lleva consigo la ooteca, la cual es visible en la cámara genital, y la suelta unas horas antes de que eclosionen los huevos. Esta ooteca es más suave que la de otras especies y permite la transferencia de agua y nutrientes en la cámara genital. Cada hembra puede producir alrededor de 4 a 8 ootecas durante su vida, y en cada ooteca hay una media de 30-40 huevos, que eclosionan tras aproximadamente tres o cuatro semanas de incubación. Un par de semanas después de la eclosión, se inicia la formación de la siguiente ooteca en el abdomen de la hembra. Dependiendo de las condiciones ambientales, el tiempo que tarda Blatella germanica en alcanzar su estadio adulto es de unos 100 días.
La hembra de Periplaneta americana desprende de la ooteca un día después de formada. En ocasiones esta libera la ooteca en algún lugar protegido cerca de una fuente de alimento. En otro caso, puede pegar la ooteca en alguna superficie con secreciones que forma en su boca. Las ootecas se forman una por mes y se ha encontrado que una hembra puede producir más de 15 ootecas en toda su vida. Cada ooteca contiene de 14 a 16 huevos y las ninfas pueden emerger en 50 o 55 días. Las ninfas mudan de 9 a13 veces antes de alcanzar la madurez. Esta especie se caracteriza porque las ninfas permanecen en el interior de la ooteca hasta su primera muda. El ciclo biológico de Periplaneta americana se desarrolla por completo en entre 200 a 400 días.
Estadios larvarios de P. americana
La Blatta orientalis transporta la ooteca durante unas 30 horas después de su formación, y posteriormente la deposita en lugares protegidos, sin esperar a que los huevos eclosionen, cerca de una fuente de alimento. El tiempo de incubación es de alrededor de dos meses. Una hembra puede producir entre 5 y 10 ootecas a lo largo de su vida, con una media de 18 huevos por ooteca, que eclosionan tras unos 60 días de incubación. El tiempo necesario para completar su ciclo oscila entre los 200 y los 800 días, según las condiciones ambientales.
A pesar de los procedimientos iniciales de saneamiento rigurosos, el control de cucarachas requerirá habitualmente una cuidadosa, selecta y dirigida aplicación de insecticidas. Estas aplicaciones acompañadas de una rigurosa inspección y medición constituirán el manejo integrado de la plaga.
Reguladores del Crecimiento de los Insectos (IGR’s)
Los avances de las tecnologías lograron ofrecer nuevas herramientas para el control de plagas. Los reguladores del crecimiento de los insectos alteran el crecimiento y el desarrollo de las cucarachas, y son mucho menos tóxicos a los humanos y a otros organismos no objetivo. Actúan en funciones metabólicas específicas de los insectos y que por lo tanto tienen alta selectividad. Los activos de este grupo que actúan principalmente como compuestos aceleradores de la muda (CAM) o inhibidores de la formación de quitina de los insectos (IQ). Los CAM cuando son ingeridos por los insectos desequilibran la relación hormonal que gobierna el desarrollo de los insectos acelerando el pasaje de un estadio al siguiente y por lo tanto produce larvas deformes o pupas que terminan muriendo o adultos con menor fecundidad o fertilidad. Los IQ, impiden la deposición de quitina luego de producido el cambio de estadio larval, por lo que el tegumento no puede proteger a la larva, se deforma la pupa o es menos fértil el adulto; en todos los casos el individuo muere.
El lufenuron es un regulador de crecimiento del tipo inhibidor de la síntesis de quitina, de alta especificidad para control de estadios juveniles (larvas, ninfas, etc.) de insectos. Por sus características físico-químicas, puede penetrar principalmente por vía oral y, ocasionalmente, por vía dérmica. Provoca la interrupción del crecimiento al inhibir la síntesis de quitina, por acción sobre la enzima quitinasintetaza. En ensayos sobre cucarachas, se han observado efectos en el crecimiento y desarrollo de las ninfas, como también en ocasiones, afectan la fertilidad de las cucarachas adultas. Sobre los adultos, ejerce su efecto sobre los órganos reproductores, disminuyendo la fecundidad en las hembras. Sobre las larvas, reduce la alimentación y evita que la vieja larva se desprenda de la cutícula al momento de la muda.
En un estudio reciente, con fecha de marzo 2022, se analizó la evaluación biológica de eficacia insecticida de un IGR en base a Lufenuron al 2 % EC (Maggot). El mismo se realizó sobre individuos juveniles de Blattella germanica, ninfas de 3° y 4° estadio, criados en bioterio, alimentados con dieta específica y aclimatados 48 horas antes del estudio (cepa del bioterio de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad de Lomas de Zamora)
Los resultados determinaron una mortalidad del 100% de ninfas en el período de 20 días, y un 0% de mortalidad sobre la muestra testigo sin aplicaciones. El porcentaje de mortalidad confirma la eficacia del producto evaluado, demostrando que presenta actividad biológica sobre ninfa de cucarachas alemanas (Blattella germanica).
Otro estudio publicado en la Revista de la Sociedad Entomológica Argentina en 2018, realizado sobre una colonia de Blattella germanica resistente a la deltametrina, demostró un drástico efecto sobre el crecimiento de la población. Siendo tan efectivo en los individuos resistentes como en individuos de una colonia sensible a la deltametrina. Este resultado podría atribuirse tanto al efecto de lufenuron como CSI disruptor de muda y también a su actividad como inhibidor reproductivo de B. germánica.
El resultado del estudio sugiere que lufenurón podría utilizarse como una alternativa para controlar B. germanica resistente a los piretroides. Su actividad de contacto y actividad residual adecuada son rasgos deseables para siendo utilizado en el control de estas cucarachas.
