Crisis, incertidumbre y entropía como oportunidades para el crecimiento.

Crisis, incertidumbre y entropía como oportunidades para el crecimiento.

“Me doy cuenta de que si fuera estable, prudente y estático viviría en la muerte. Por consiguiente, acepto la confusión, la incertidumbre, el miedo y los altibajos emocionales, porque ése es el precio que estoy dispuesto a pagar por una vida fluida, perpleja y excitante”.

Esta frase de Carl Rogers, describe el estado actual de la Psicología Humanista que considera la ontología, desde un punto de vista holístico.

El abordaje y comprensión del significado de las crisis para el ser humano, es un punto nodal en el Counseling, que anuda el concepto de sesgo tradicionalmente negativo, con una perspectiva mas optimista que incluso entiende a las crisis como parte necesariamente presente en la vida, para que se realice el desarrollo humano en el devenir irreversible del tiempo.

No es novedad la consideración de la segunda ley de la termodinámica en las aproximaciones ontológicas contemporáneas de la Filosofía y la Psicología. Desde el Counseling, se promueve la comprensión de la entropía como un principio desestabilizador del orden presente en el sistema complejo que somos los humanos, promoviendo así el impulso a la realización de transformaciones.

La palabra Entropía proviene del griego ἐντροπία y significa básicamente una entidad o dimensión que tiende a la evolución o la transformación. En termodinámica se refiere al principio según el cual, si bien la primera ley establece que toda la energía presente en el universo es constante, no se crea ni se destruye jamás, sino que se transforma; esa energía está afectada de entropía, es decir que tiende a la degradación, al desorden.

El panorama no parece muy alentador si consideramos que todo tiende a la degradación, a la aniquilación. Pero otros descubrimientos científicos en el área de la física (La teoría del campo de Lewin, los descubrimientos de Henri Poincaré; las leyes del caos de Ilya Prigogine, la investigación cuántica de Dirac, Heisenberg y Pauli, etc) nos dan otra perspectiva del funcionamiento de los sistemas complejos, como lo es el ser humano y sus construcciones sociales.

Desde estas miradas, las relaciones e interacciones humanas no son pasibles de ser eliminadas ni separadas en componentes, sino que forman parte de un todo y la entropía y la no linealidad, encarnan tensiones esenciales entre el orden y el caos, catalizadoras de transformación en la materia. Cualquier pequeño cambio, movimiento o modificación en uno de los componentes, puede afectar al sistema total y de hecho, ocurre necesariamente para que se genere el movimiento, el cambio, el devenir.

“Ser imprevisible, ser un horizonte abierto a toda posibilidad, es la vida auténtica, la verdadera plenitud de la vida” (J. Ortega y Gasset)

Ahora relacionemos esto con el concepto de Crisis. La palabra deriva del verbo en griego antiguo “krinein”, cuyo significado es juzgar o separar, para tomar una decisión y cuyo sustantivo “krisis” significa juicio, decisión. Crisis denota algo que se rompe y al romperse hay que analizarlo, para recomponerlo. También se relaciona con la palabra "Criterio" o "Crítica" que tienen que ver, ambos, con el juicio y decisión.

En nuestro contexto, la palabra remite a un proceso de transformación en el cual irrumpe un acontecimiento que nos pone frente al desequilibrio y nos impulsa a tomar decisiones para resolverlo, a poner en práctica nuestro juicio, nuestro criterio, para avanzar, para aprender, para crecer y desarrollarnos.

Las crisis son ese movimiento energético, que introduce la medida de la probabilidad en nuestras vidas y nos genera incertidumbre. Movimiento necesario en el sistema complejo y abierto que conformamos, para ponerlo en marcha, como la combustión en un motor o la ingesta de alimento para los organismos.

Toda la energía en el universo se transforma, nunca se crea ni se destruye. Las crisis son necesarias para la activación de la creatividad, el crecimiento, el despliegue, la transformación, el movimiento, la puesta en práctica de aprendizajes previos y la elaboración de habilidades y competencias nuevas, originales y singulares.

Si me han leído hasta aquí, me gustaría haberlos inspirado a pensar en algunas crisis vitales que los han llevado a ser quienes son hoy. Los momentos en que hemos perdido el control y el desorden parecía tomar la totalidad de nuestras vidas. ¿Qué has aprendido de cada una de esas crisis? ¿Qué decisiones, criterios, capacidades y oportunidades descubriste en el esfuerzo por superarlas?


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