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Agua o cerveza, una cuestión de prioridades

Sobre el blog

Antonio García Pastrana
Gerente de Servicios de Aguas. Interesado en: Agua, sostenibilidad, medioambiente, RSE, comunicación, redes sociales, TIC, innovación, creatividad, y en general en todo lo que nos ayude a dejar un mundo mejor a nuestros hijos.
  • Agua o cerveza, cuestión prioridades

Hace unos días, al hacer la selección de noticias, que a mi modesto criterio me parecen más interesantes para compartir, descubrí un conflicto social en México motivado por nuestro más preciado recurso, el agua.

Me sorprendió no haber tenido noticias antes de este asunto, ya que no es precisamente nuevo. En concreto nace en  2016. Por lo que he podido averiguar, es un conflicto que ha estado generando noticias desde hace ya más de un año. También es cierto que en España con la situación actual de sequía, tenemos una sobre saturación de mensajes, que quizás nos impiden ver otros temas de interés. Esto nos deja un poco ciegos, ya que cambiando de perspectiva podemos tener nuevos puntos de vista sobre nuestros propios problemas que podría ayudarnos a solucionarlos.

Estaréis un poco intrigados, sobre el asunto que quiero tratar, y quizá con la garganta un poco reseca y deseosos de dar un “buchito” de … ¿de qué? agua o cerveza. Supongo que dependerá de las prioridades de cada uno

El tema que me inspira el título es la construcción en Mexicali (México) de una planta productora de cerveza, por la empresa Constellation Brands. Esta empresa tiene más de 100 marcas de bebidas, y es una de las tres principales importadoras de cerveza en Estados Unidos.

Bueno y diréis, y ¿qué problema hay porque se construya una nueva cervecera?, si una cerveza de vez en cuando sienta muy bien, y además supongo que con esta inversión se generarán empleos y riqueza en la región. Según algunas fuentes hasta 1.000 empleos directos y otros 4.000 indirectos, lo cual no es nada desdeñable para el desarrollo económico de una región.

Como supondréis, el conflicto viene por el agua. La planta que se está construyendo, está diseñada para producir 10 millones de hectolitros de cerveza en su fase inicial. Lo pongo en números para hacernos una idea: 1.000.000.000 de litros. Y en letras: mil millones de litros de cerveza, o lo que traducido a un término más usado en el sector del agua, es igual a 1 millón de metros cúbicos o 1 hectómetro cúbico de cerveza. ¡Vaya mareo con tanta cerveza!

Este es el volumen de producción inicial, y si todo va bien, el proyecto contempla duplicar el volumen de producción hasta 20 millones de hectolitros de cerveza.

¿Cuánto agua se necesita para producir esa cantidad de cerveza?

Si tenemos en cuenta que la huella hídrica promedio para producir 1 litro de cerveza, considerando todo el ciclo de vida desde la fase agrícola, es de unos 160 litros de agua, y que de estos, en la fase de producción en planta, que es la que nos afecta, es de unos 3,7 litros de agua por cada litro de cerveza, podemos hacer el siguiente cálculo.

Para producir 1 hectómetro cúbico de cerveza contemplando sólo la fase final de la huella hídrica, la que corresponde a la fábrica de Mexicali, serían necesarios 3,7 hectómetros cúbicos de agua. Esta cantidad se duplicaría con el total desarrollo de la planta, hasta un consumo de 7,4 hectómetros cúbicos de agua para producir 2 hectómetros cúbicos de cerveza. Auqnue al parecer, pude ser necesaria una cantidad de agua mayor, porque algiunas fuentes dicen que la cervecera ha solicitado una concesión de agua de 20 hectómetros cúbicos de agua al año.

Para que nos hagamos una idea de lo que estas cantidades suponen. Si tenemos en cuenta un consumo medio por habitante de 150 lit/día … de agua, no de cerveza. Con los 7,4 Hm3 de agua que necesita la cervecera para producir los 20 millones de hectolitros de cerveza al año, el total de la población de todo el municipio de Mexicali (1.052.656 habitantes) podría abastecerse de agua durante 47 días, o se podría abastecer a todo Madrid (3.200.000 habitantes), que es la segunda ciudad más poblada de Europa, durante algo más de 15 días.

Si consideramos los 20 Hm3 de la concesión solicitada las cifras anteriores se multiplican casi por tres. Es decir que se podría abastecer a todo Mexicali durante aproximadamente 4 meses y a Madrid durante un mes y medio

Evidentemente esta cantidad de agua, es mucha agua. Para enfrentar este problema, la solución que se ha diseñado, es la construcción de un acueducto de 47 kilómetros de largo. Esta macro infraestructura serviría para llevar agua del acuífero del Río Colorado hasta el sur de Mexicali, con la finalidad de abastecer a la planta cervecera. En este punto me paro, y me hago esta pregunta. ¿No nos resulta familiar este planteamiento?

¿Cuál es la situación de Mexicali en lo referente a la disposición de agua?

Mexicali es un municipio del estado de Baja California (Mexico) además de su capital. Su ubicación, justo en la frontera con Estados Unidos lo hace un punto muy interesante para la instalación de centros de producción que luego exportan al país vecino.


FUENTE: INEGI. Marco Geoestadístico Municipal 2010

Como el resto del estado de Baja California tiene un clima mediterráneo, igual que en el centro y sur de España. Y como continuidad geográfica del estado de California, también sufre las periódicas sequías severas de este estado.

Vamos, un clima, casi, casi, casi igual al que tenemos en el centro y sur de nuestra querida península ibérica. Con nulas lluvias en verano y periodos recurrentes de varios años seguidos con muy bajas precipitaciones. En este punto la familiaridad con el caso ya prácticamente nos hace hermanos de penurias hidrológicas.

En este escenario que se ha dibujado en Mexicali, tenemos un clima con escasez de agua, una población que demanda unos usos del agua para consumo y usos agrícolas y una industria que demanda agua para la producción de cerveza. Evidentemente con estos ingredientes, es fácil que surja el conflicto, como así ha sido.

Ante la escasez y un panorama en el que la cervecera va a necesitar una gran cantidad de agua, los habitantes, y principalmente los agricultores, que sufren escasez de agua para sus cultivos, se han unido en protesta contra la implantación de la fábrica. Defienden su derecho a un agua, que consideran prioritario, frente al uso industrial de la cervecera. Y han constituido el movimiento Mexicali Resiste o Comité por la Defensa del Agua de Baja California.

Por lo que he podido averiguar, en Mexicali en concreto, la población dispone de agua corriente en sus domicilios las 24 horas del día, por lo que el problema en principio no surge por un conflicto de intereses entre el abastecimiento de agua a la población y la cervecera. Al parecer la disputa es entre los agricultores y la nueva actividad industrial. Eso no quita que en un futuro, y ante un escenario de cambio climático, que presenta tantas incertidumbre respecto a la disponibilidad de agua, no pueda surgir también un problema para el consumo humano.

Según los datos de Conagua del año 2016, Mexicali es una de los estados que tiene una mayor presión sobre sus recursos hídricos, debido al uso agrícola del agua. Por aquí podemos empezar a entender el origen del conflicto. Un recurso que se encuentra al límite de su utilización, que se debe de repartir con un nuevo actor. Es decir, que como la cantidad de agua es limitada, si se usa para una cosa, no se puede usar para otra, y surge un conflicto de intereses.

En este punto es donde se debe de plantear una cuestión de prioridades

Es necesario decidir donde es más beneficioso para la sociedad, en su conjunto, destinar el uso del agua. Y recalco, lo de la sociedad en su conjunto, ya que no se trata de generar beneficio a unos pocos a costa de muchos. 

Aquí hay que tener cuidado, porque muchas veces se presentan datos macroeconómicos de progreso, en los que parece que la sociedad mejora, pero sólo lo hacen unos pocos. Lo aclaro, por ejemplo, el P.I.B de una región puede mejorar un 10%, y parece que todos los habitantes de esa región han mejorado su economía, pero puede ser que ese 10% sea debido sólo a la mejora de unos pocos que hayan incrementado sus ingresos un 300%, y el resto nada o incluso que hayan empeorado. Es el fondo de la famosa brecha social, de la que muchas veces vemos noticias en los medios.

Por tanto se trata de tomar decisiones en las que el uso del agua sirva para generar progreso y reparto de riqueza. Y de nuevo debemos de tener cuidado, ya que muchas veces detrás de ciertos planteamientos de progreso se pueden esconder intereses particulares. Por ejemplo, hay determinados usos agrícolas que a veces se escudan en argumentos de producción de alimentos para el sustento de la sociedad, cuando lo que de verdad esconden son intereses económicos de unos pocos productores, en una actividad en la que su fin, no es alimentar al mundo, sino lograr el mayor beneficio económico posible. Y aquí se pueden diferenciar cultivos que casi se podrían ser considerados desde un punto de vista de producción industrial, y cultivos para la alimentación. De hecho una parte importante de la producción agrícola del mundo no se destina a usos alimentarios. Un ejemplo es el uso que se hace de los cereales para la producción de biocombustibles.

Aún siendo el fin de la producción agrícola, el uso alimentario, también es importante dieferenciar el tipo de explotación. No es lo mismo los grandes latifundios, en los que el propietario es uno sólo y explota sus tierras desde un punto de vista industrial, tratando de obtener el máximo beneficio económico, sin importar el tipo de cultivo. En este tipo de explotación el agricultor suele ser un simple asalariado, al igual que lo puede ser el trabajador de una fábrica de producción de cerveza. 

Distintas son las explotaciones de menor tamaño, en las que el agricultor es también el propietario de la tierra, y en las que el tipo de cultivo tiene especial importancia en que sea para uso alimentario y se comercializa en un ámbito más local. Este tipo de explotaciones consiguen un mayor reparto de riqueza, además de un modo de asentar población en el medio rural.

Sin que ninguno de los usos sea ilegítimo, a la hora de tomar decisiones de cuales deben de ser los usos prioritarios del agua, todos los aspectos comentados deberían de tenerse en cuenta por parte de aquellos que tienen en sus manos la capacidad de apoyar unos usos u otros.

Desde mi punto de vista hay cinco cuestiones fundamentales a la hora de decidir cual son los usos prioritarios para el agua:

1.- El primer uso y que nunca debe de ponerse en riesgo por cualquier otro, es el abastecimiento humano de agua de boca y usos sanitarios, es decir garantizar el agua de grifo. Al fin y al cabo es uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados por la ONU.

2- El segundo uso debe ser la producción alimentaria sin que se priorice el beneficio económico sobre la sostenibilidad en el sistema productivo. Esto cobra una vital importancia si tenemos en cuenta que según las últimas predicciones del World Economic Forum, "En 10 años, el mundo podría no ser capaz de producir suficientes alimentos para todo el planeta".

3.- Se deben de promocionar usos agrarios que consigan el mayor reparto de riqueza posible para disminuir la brecha social existente, además de ser sostenibles. A este respecto, un dato aportado por Oxfam en el informe que remitió a los participantes en el último Foro Económico de Davos, el pasado enero de 2018, "el 82 por ciento de la riqueza mundial generada durante 2017 fue a los bolsillos del 1 por ciento más rico de la población, mientras el 50 por ciento más pobre –3.700 millones de personas– no recibió nada de dicho crecimiento"

4.- Junto con los usos descritos en los tres primeros puntos, debemos de buscar un equilibrio para permitir que los sistemas ecosistémicos puedan seguir cumpliendo sus funciones naturales (caudales ecológicos, niveles de encharcamiento en humedales, garantía de niveles mínimos en acuíferos, etc...), ya que ponerles en peligro supone que a medio y largo plazo no seremos capaces de cubrir nuestras necesidades de agua, mientras no seamos capaces de traerla de otro planeta. Son los sistemas ecosistémicos los que nos garantizan la disponibilidad de agua. A este respecto me remito al artículo que escribí el año pasado sobre este tema, "Valorización ecosistémica en el sector del agua. ¿Qué narices es eso?".

5.- Una vez que las prioridades anteriores estén cubiertas, el agua disponible restante sería la que podríamos utilizar para otros usos, y aún en este caso nunca deberíamos de perder de vista el aspecto de reparto de la riqueza a la hora de designar estos usos marginales del agua. No olvidemos que aunque no siempre lo valoremos, es nuestro bien más preciado.

Al que no entienda estas prioridades yo le pondría en la siguiente situación: En medio del desierto y con vistas a dejarlo a su suerte, le daría a elegir dos cosas de tres posibles: un bidón con 20 litros de agua potable, un saco de hortalizas y pan, y un lingote de oro. Esas mismas necesidades y elecciones son las que deben de primar en el uso del agua.

Como conclusión, nos tenemos que plantear que el uso del agua es una cuestión de prioridades, agua o cerveza; agricultura o cerveza; agricultura o abastecimiento de personas; agricultura industrial o agricultura de primer recurso; beneficio económico o reparto de riqueza; y no olvidemos las necesidades de los sistemas ecosistémicos que son la base que permite el resto de usos.

Por tanto en Mexicali y en general en el resto del mundo, sobre todo donde existen conflictos de usos, como ocurre en el sur y centro de la península ibérica, se debería garantizar, primero el abastecimiento de las personas, sin ponerlo en riesgo por el desvío de agua a otros fines (agrícolas, industriales); garantizar el buen mantenimiento de los sistemas ecosistémicos; y tras lograr esto, promover el uso agrario de primer recurso, es decir aquel en el que la producción sea destinada a uso alimenticio y en el que se logre el mayor reparto de riqueza posible.

Sin mirar muy lejos, echemos un vistazo a nuestro alrededor, y veamos donde existen este tipo de conflictos y cuales son los criterios de prioridad de usos que se están aplicando. Seguro que encontramos muchos casos cercanos sobre los que plantearnos estas cuestiones.

Para terminar una última reflexión:

Beber una cerveza cuando tenemos sed, está muy bien, aunque marquemos bien nuestras prioridades para no dejar a nadie sediento por tomarnos una cerveza

Gracias por haber dedicado unos minutos a leer este post y gracias también anticipadas por compartir tus reflexiones.

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