Vogue Hombre

Nacho Figueras: "El polo femenino crece más que el masculino"

Conversamos con el célebre jugador de polo en su última visita a la Ciudad de México sobre su vida, la renovación que el polo necesita, y su opinión del movimiento#MeToo
Nacho Figueras
Actualmente, Figueras es embajador del hotel St. Regis a nivel globalCésar Durione

Vestido de traje gris claro y camisa blanca (luego se cambió para las fotos), me esperaba Nacho Figueras en un elegante salón del hotel St. Regis de la Ciudad de México. Si a la escena le suman su físico, altura y fama global, el momento podía ser cuando menos intimidante, pero no lo fue. Frente a mí, estaba el jugador de polo argentino de 41 años, considerando uno de los mejores del mundo, probablemente con la misma actitud y charm con los que conquistó al mundo y a los millonarios de Bridgehampton, en el condado de Suffolk, Nueva York, cuando tenía 20 años. Tras jugar en París y en los clubes españoles de Puerta de Hierro y Sotogrande, fue precisamente en Estados Unidos donde conocería al fotógrafo Bruce Weber, quien le presentó al hombre que en buena medida cambió su destino: el diseñador estadounidense Ralph Lauren.

- ¿Qué tan importante fue en tu vida el personaje de Bruce Weber?

- Lo conocí en una comida en Los Hamptons donde yo estaba jugando al polo, fue él quien me presentó a Ralph Lauren, y esta relación sí marcó un antes y un después en mi carrera y en mi vida. Fueron 18 años de trabajo con la marca. Me dio un reconocimiento que me ayudó a potenciar mi carrera en el polo.

- ¿Nunca te sentiste incómodo frente a las cámaras?

- No porque nunca le di demasiada importancia. Bruce siempre fue muy bueno y claro conmigo: Vos son Nacho el polista, quiero ver ese personaje y no otro, me decía. Lo disfruté mucho, pero mi vida es mucho más profunda que eso. Ni siquiera me considero modelo. Yo solo fui un jugador de polo que hacía campañas para una marca.

- El polo es ese tipo de deporte que le permite a un joven de clase media jugar con el príncipe Harry... ¿Cómo cambió tu vida la práctica de este deporte?

- Winston Churchill dijo que el polo es un pasaporte para el mundo. Esa es la mejor síntesis de lo que el polo es y ha sido para mí. Crecí en Argentina rodeado de caballos y eso marcó mi destino como cuando naces en Hawái y terminas siendo surfista. Me abrió un montón de puertas.

- El polo se ha mantenido muy estático frente a otros deportes que sí se han renovado en los últimos años. ¿Cuál es tu opinión al respecto?

- Creo que está un poquito estancado por la falta de cambios. Ahora no te puedo contar, pero estoy trabajando en un proyecto en el que podamos ver un polo diferente... En la Asociación Argentina de Polo hay un nuevo grupo que está intentando de impulsar ciertos cambios, pero no es fácil en una organización con 120 años de historia. La idea es masificarlo un poco más, darle velocidad, la cancha de polo es muy grande, entonces para el que nunca ha visto polo y no entiende de caballos, se pierde la jugada. No es un deporte fácil de interpretar.

El jugador de polo, modelo y empresario, Nacho Figueras

César Durione

- ¿Cuántos caballos tienes?

- Tengo una cría de caballos en Argentina con mi familia, en la que todos practicamos el polo. Son alrededor de 300. Es un animal muy noble, que es muy importante en mi vida y en la historia universal.

- ¿Has tenido algún accidente sobre un caballo? Muchas personas les temen...

Yo le temo a una moto (me muero de miedo), pero a los caballos, no. Todo es acostumbrarse. Lo peor que me pasó fue quebrarme la cadera en 2013. Estuve 12 semanas y un día usando muletas. Luego comencé a jugar al polo de nuevo. Estaba esperando con ansías ese momento mientras me recuperaba.

Cambiando de tema, este fue el año del movimiento feminista#MeToo y tú en buena medida representas al "hombre perfecto" ¿Para ti qué significa ser hombre hoy?

Yo soy un hombre muy feminista. Este movimiento es muy importante y necesario, tengo dos hijas y una esposa y lo apoyo fervientemente; pero también siento que no hay que olvidarse del hombre. Creo que está habiendo un exceso de femeneidad, que no es ni bueno ni malo, pero el balance entre el hombre y la mujer es importante. Por otra parte, no creo en el pago igualitario, si una mujer merece un salario más alto que el de un hombre, porqué no se lo van dar. En mis años con Ralph Lauren las mujeres ganaban diez veces más que yo porque así era el sistema ... Si yo fuera actor en una película con Anne Hathaway, por qué iría a ganar lo mismo que ella que ganó un Oscar... Creo que está en mí negociar o no, pero por muchos años no se le dio la oportunidad a las mujeres de negociar desde el mismo nivel.

No podemos olvidarnos del rol del hombre, como tengo hijas, también tengo un hijo, y no hay que enseñarle a los hombres a tener miedo a interactuar con las mujeres. Creo que eso está pasando. Hoy si tienes una reunión con una mujer en una empresa, tienes que dejar la puerta abierta, pero si la mujer solicita la reunión, ella tiene la libertad de cerrarla... No quiero criar a mi hijo diciéndole: Cuidado con lo que haces o digas... No se debe perder ese trato entre hombres y mujeres, con todo el respeto del mundo, sin que ninguno le haga al otro lo que no quiere que le hagan. Me da mucho miedo tener que decirle en un futuro a mi hijo que no le dé la mano a su novia en el cine. Me pone un poco nervioso ese tema. Dentro de todo este movimiento, no podemos olvidarnos de los hombres, repito.

¿El polo tampoco ha sido un deporte muy incluyente con las mujeres?

Ahora sí, de hecho, crece más el polo femenino que el masculino. En la Asociación de Polo de Estados Unidos, de cada 3 nuevos miembros, dos son mujeres. En Argentina, es uno a uno. Hace 10 años, había 5 mil miembros hombres y 200 mujeres. Todavía no se equipara, pero el ritmo de crecimiento va palo a palo entre hombres y mujeres, ¡y está buenísimo!

¿Eres alguien que piensa mucho su estilo?

No demasiado. Me paso el día encima de un caballo. Creo mucho en vestirme para sentirme cómodo. No me fijo mucho en lo que está cool o está mal. Uso muchos jeans, botas, alpargatas, saco cuando hace falta. Viajo seis meses por año y eso condiciona mucho cómo me visto.

Los últimos meses han sido muy convulsos en Argentina. ¿Cómo ves la situación?

Estamos saliendo de 70 años de Peronismo. Un sistema muy corrupto y contaminado. ¿Es un sistema que está costando limpiar? Sí. Esto no es cuestión de 1, 2 o 3 años. Tendrán que pasar 10 o 20 años para que muchos cambien su forma de pensar. Hay que pelear.

Nacho Figueras y su esposa, Delfina Blaquier, en la boda real de Harry y Meghan

Getty Images

¿Cuándo empezó tu relación con el hotel St. Regis?

Empezó en 2008, cuando estaba en los preparativos de un partido de polo que hago en Nueva York, al lado de la Estatua de la Libertad; e investigando un poco encontré que la familia Astor, los creadores del St. Regis, eran asiduos a los partidos de polo y hacían cenas con los jugadores en el hotel. Me acerqué entonces a ellos para empezar una relación que hoy se mantiene. Empezamos organizando partidos de polo alrededor del mundo, pero hoy en día hacemos más cosas. Ellos también apoyan a la fundación del príncipe Harry, de la cual soy embajador.

¿Tu relación con el príncipe Harry va más allá de la cancha? ¿Son muy amigos? Fuiste el único argentino que asistió a su boda...

Es alguien que considero un gran amigo. La boda real fue precisamente eso para mí, la boda de un amigo; pero sí, fue un mega evento.

Ya tienes 40 años ¿Tu retiro de la cancha está cerca? ¿Has pensado en tus próximos pasos?

Estoy en los primeros 40 años de mi vida, pienso vivir hasta los 140... (Jajaja). Todavía me quedan 10 ó 15 años jugando polo, quizás no al 100 por ciento, pero sí en condiciones para exhibiciones o actividades benéficas. El polo es mi plataforma y la base de mi relación con marcas como St. Regis o Veuve Clicquot, también me gusta mucho la arquitectura e inauguramos en Argentina unas caballerizas que tuvieron mucha repercusión con dos arquitectos que son muy amigos. Ahora estamos diseñando un proyecto similar en Napa Valley que me emociona mucho. Por otra parte, con mi esposa compré una marca de moda llamada Ácheval Pampa, que hace una reinterpretación del gaucho chic y la tradición argentina.

Justo cuando acababa la entrevista, me llegó la gran relevación. Al comentarle que era venezolano, Nacho me dijo: "¿Sabes algo? Yo nací en Valencia, Venezuela, por el trabajo de mis padres, pero regresamos a Argentina meses después, y solo volví una vez hace muchos años", me contó. He aquí la clave de Nacho Figueras, siempres sabe cómo empatizar y meterse a la gente en el bolsillo.

El polo convirtió a Nacho Figueras y al príncipe Harry en grandes amigos

Getty Images

DESCUBRE: ¿Por qué Timothée Chalamet se viste tan bien?

DESCUBRE: ¿Machista yo? Responden los seleccionados de la Lista Vogue Hombre de la temporada