Jamal Bhuyan será el primer jugador de la historia de Bangladesh que jugará en Argentina y en Buenos Aires, concedió una nota a Periodistan (Fernando Duclós).

Jamal nació hace 32 años en Copenhague, Dinamarca. De padre y madre bangladeshí, que partieron a Europa por más oportunidades. Hizo las inferiores en el FC Copenhague, el club más importante del país. 

En 2006, Jamal tenía 15 años, jugaba al fútbol y estudiaba. Un día cualquiera, al salir de la escuela, quedó en medio de un tiroteo entre dos bandas rivales armadas en la capital de Dinamarca y le pegaron 4 tiros.

"Pero, por suerte para mí, me salvé. Estuve dos días en coma. Y al año y medio, pude volver a jugar al fútbol", le contó Jamal a Fernando Duclós mientras le mostraba su pecho lleno de cicatrices, en un café de la avenida Corrientes.

"Fue lo más terrible que me pasó en la vida. Y me sobrepuse. El tiroteo fue un viernes. Fue grande. Hubo más heridos y muertos. Me desperté el domingo en el hospital y no entendía absolutamente nada”, aseguró el crack asiatico.

Jamal volvió a jugar en 2007. Y cuando la Federación de Fútbol se enteró de que había un jugador de raíces locales en Europa, lo llamó y convocó. Al final, se mudó a Dhaka y debutó en la selección en 2013. En 2018 se convirtió en el capitán nacional y todavía lo es.

Luego, se metió de lleno en lo futbolístico y se comparó con Iniesta o Pirlo.

“Juego de volante central. Me gusta tener la pelota, distribuir y organizar. No soy nada tímido dentro del campo, pero tampoco hablo todo el tiempo; eso sí, no para marcar errores y sí para alentar. Fíjate en Pirlo, e Iniesta, son tipos callados pero al mismo tiempo, son líderes”, aseguró.

Por último, reconoció que sigue a Boca y River pero ahora es hincha de Sol de Mayo.

“Me gusta todo el fútbol argentino, sigo a River, Boca... conozco todo, eh: Estudiantes por Verón, Argentinos por McAllister. Pero ahora soy hincha de Sol de Mayo de Viedma”, concluyó.