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      El holograma del agujero negro y otras teorías de Stephen Hawking

      El astrofísico británico fue uno de los que más investigó en este misterio del universo.

      El holograma del agujero negro y otras teorías de Stephen HawkingStephen Hawking contribuyó a develar los misterios de los agujeros negros

      Una de las mentes que más hurgó en la cavidad de los agujeros negros fue la de Stephen Hawking, físico de la Universidad de Cambridge, autor de numerosos ensayos científicos. En la década del 70, tomó como base los estudios de Einstein para lograr una aproximación desde la física cuántica a estos fenómenos cósmicos. También sostuvo que con el tiempo, un agujero negro puede emitir tanta radiación que llega a evaporarse "como una aspirina en un vaso de agua".

      En 1974 propuso una idea bastante novedosa: que los agujeros negros -supuestamente pozos gravitacionales ineludibles- no son completamente opacos, ya que son capaces de emitir espontáneamente pares de partículas. Algo que contradice la idea de pozos sin fondo que sólo engullen materia, ya que también expulsan luz.

      Descripción de las teorías de Einstein y Hawking sobre los agujeros negros - AFP / AFPDescripción de las teorías de Einstein y Hawking sobre los agujeros negros - AFP / AFP

      Además, con el tiempo, los agujeros pueden emitir tanta radiación que llegan a evaporarse por completo. Esta teoría revolucionaria, pasó a llamarse radiación Hawking.

      Así, cuando un agujero negro, producto de la muerte de una gran estrella que se quedó sin combustible, colapsó bajo su propia gravedad -de acuerdo a la mecánica cuántica- el agujero negro debe almacenar la información sobre la estrella que le dio origen, así como cualquier materia que haya caído en él. Pero si el agujero alguna vez se evapora, la información de las partículas guardadas se perderá totalmente.

      El astrofísico británico postuló una teoría llamada radiación Hawking (AFP)El astrofísico británico postuló una teoría llamada radiación Hawking (AFP)

      En este punto es donde se activan las alarmas. Ya que la física cuántica, la mejor descripción del comportamiento del universo a nivel subatómico, sugiere que la información no puede destruirse. Pero de acuerdo a la relatividad general, la información cuántica debe ser destruida sin importar lo que suceda. Esto generó la paradoja de la pérdida de información en agujeros negros.

      Treinta años más tarde, el teórico ensayó una respuesta a la paradoja de la pérdida de información, una forma de lograr que los agujeros negros tengan “pelo”. Durante una presentación realizada en el Instituto Real de Tecnología KTH, de Estocolmo, propuso que “la información no se almacena en el interior del agujero negro como uno podría esperar, si no en su límite, el horizonte de sucesos”, como explicó.

      El resultado, que es muy difícil de validar, indica que los agujeros negros no tragarían ni destruirían la información física sino que la almacenarían en un holograma de dos dimensiones fijado en sus bordes y que representa su punto de no retorno. La información se guardaría en forma de las llamadas súper traducciones.

      Estas súper traducciones estarían constituidas por las partículas de la estrella muerta y cualquier materia que cayó en el agujero negro cuando cruzó por primera vez el horizonte de sucesos.

      Sin embargo, nada es tan simple como la luz, ya que según el astrofísico, como la información que sale está fusionada, no existe una forma práctica de reconstruir aquello que entró basándose en lo que se expulsa. Esta mezcla se produce porque el horizonte aparente es de naturaleza caótica, algo similar a la meteorología terrestre.

      “La información requiere de energía y la energía tiene masa, lo que implica que si guarda demasiada información el sistema colapsará. A medida que las partículas escapan de un agujero negro, éste perderá masa y se encogerá, lo que también aumentará la tasa de emisión de partículas. Al final, el agujero negro perderá toda su masa y desaparecerá”, explica Hawking en su libro póstumo Breves respuestas a las grandes preguntas.

      AS


      Sobre la firma

      Marcelo Bellucci

      Redactor de Ciencia, Tecnología y Sociedad mbellucci@clarin.com

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